Como ordenar tu armario en 15 pasos y disfrutar de toda tu ropa.
Te sorprenderás del exceso de indumentaria que tienes, de la cantidad de prendas que no usas e incluso, de las que nunca has usado.
Cuando termines de organizar tu armario, verás todo el espacio útil que tienes, y será como descubrir un armario nuevo, donde todo será más fácil de encontrar.
Empezamos cuando quieras
- Busca una zona despejada como la cama o el suelo limpio, para depositar todo lo que saques del armario.
- Ten a mano bolsas grandes o cajas de cartón que utilizarás para poner la ropa que quieres tirar, donar, regalar o vender. Sí está en buenas condiciones la puedes vender, regalar o donar. Sí está en malas condiciones, tírala sin más contemplaciones. La ropa interior usada, se tira directamente.
- Saca toda la ropa del armario y deposítala en la zona despejada.
- Aprovecha para limpiar el polvo de las baldas, las bisagras y las puertas. Reparte antipolillas de lavanda o de cualquier aroma que te guste, o bien puedes poner pastillas de jabón, por todo el armario.
- Con el armario vacío y antes de empezar a guardar, decide que baldas o cajones son para ti los más cómodos y accesibles de usar, y allí es donde ubicarás la ropa que te pones habitualmente.
- Clasifica la ropa por categorías, por ejemplo, las camisetas juntas, los vaqueros igual, las faldas, y así cada prenda con su categoría. Empieza por una de las categorías, escogiendo primero las prendas que te pones habitualmente, que te sientan bien, que son tu talla y tu estilo, y que te gustan. El resto tendrás que probártelo para comprobar si está bien, si te gusta o si lo necesitas.
- En este punto, deberías tener ropa preparada para guardar, tirar, donar o regalar. Las tres últimas deposítalas en su bolsa o caja correspondiente.
- Guarda lo que has escogido primero, pero no te olvides de hacerlo por categorías igual que antes cuando las has clasificado. Pon juntos todos los pantalones, lo mismo con las camisetas, igual con las faldas, etc. Siempre será más fácil acceder y encontrar la prenda que quieras o necesites.
- Sí quieres rizar el rizo, puedes poner la ropa por colores, tamaños, calidades, conjuntos (trabajo, deporte, estar por casa). A tu elección. Lo esencial, es que vayan por categorías separadas, así siempre será más cómodo localizar y coger la pieza que quieras.
- Dobla bien la ropa y ocupará menos espacio. Hay prendas, que es mejor doblarlas que colgarlas para evitar que se deformen, como los jerséis.
- Procura poner las perchas en la misma dirección, y serán más fáciles de sacar. Si puedes, usa las perchas a juego, y tendrás más sensación de organización. No vuelvas a poner 7 prendas en una percha, aparte de estropearse y arrugarse la ropa, las que quedan atrapadas en el interior nunca se usan.
- Si vas a guardar ropa en cajas y eres de las que te despistas, procura etiquetarlas porque es muy fácil olvidar en poco tiempo, lo que hay dentro.
- Durante este proceso, ya has comprobado que tienes vestuario de sobra, que tienes prendas que ni te acordabas, otras que no te valen o no las necesitas, y otras que las puedes tirar directamente, e incluso has visto alguna cosa que sabes a quien le puede gustar.
- Procura no volver a llenar el armario hasta reventar. Deja que fluya el aire y que la ropa no esté comprimida, y así no se arrugará. Cuantas menos prendas tengas en el armario, más sencillo será mantenerlo ordenado.
- En el transcurso de esta tarea, te darás cuenta si te hace falta un pantalón nuevo o si necesitas un complemento o quieres una chaqueta, apúntalo para tus próximas compras.
Unos consejitos
- Si tienes espacio en el armario debajo de las perchas, aprovecha para poner una cómoda. Es una forma de aprovechar el hueco vacío.
- Utiliza los espacios de las paredes o las puertas del armario para crear otro espacio adicional, instalando un colgador para otras piezas, como los complementos.
- Puedes poner una bolsa dentro del armario para ir desechando ropa que no usas. Cuando esté llena, la llevas a donar o a un contenedor de ropa usada. Es una buena forma de eliminar y evitas volver a guardar la prenda en el armario.
- Otra opción es darle una segunda vida a una prenda que te guste, ya sea reciclándola o transformándola.
No sientas remordimientos por deshacerte de ropa. No pienses en lo que te costó, no pienses en quien te lo regaló, no pienses que es una marca de moda, simplemente… piensa en ti. Piensa que, todas esas prendas que no necesitas, están ocupando un espacio estupendo y hacen que tu armario parezca que va a explotar.
Cuando veas tu armario ordenado, disfrutarás de todo lo que tienes, porque es el vestuario que te gusta y te sienta bien. Y pocas veces repetirás: “¡no sé qué ponerme!”
Espero que estos 15 pasos te ayuden a despejar y ordenar tu armario.
Gracias por tu atención.